Puede usarse para reforzar trabajos de impermeabilización sobre áreas comprometidas tanto en forma puntual (venda), así como para solucionar problemas que requieran generar una superficie homogénea y duradera (manta). Se aplica como paso intermedio cuando se emplean productos elastoméricos, impermeabilizantes o selladores aumentando el índice de tracción, conformando un trabajo uniforme y de gran resistencia al tránsito y al uso diario.